Proceso de adaptación
al Jardín Infantil

El proceso de adaptación de los niños al jardín

El jardín infantil complementa la acción educadora de la familia. Al ingresar al jardín, los niños aprenden a compartir con otros, a conocer sus posibilidades y limitaciones, enriquecen su lenguaje, fortalecen hábitos e incorporan otros tantos. No hay duda de que el inicio de la vida escolar a través del jardín infantil resulta muy beneficioso para la vida de los niños y marca pilares fundamentales en su futuro integral como ser humano activo de la sociedad.

La adaptación al ambiente escolar es un proceso que comienza cuando el niño(a) ingresa al jardín; esto es algo totalmente nuevo para él(ella), personas, actividades, ambientes y lugares físicos se presentan ante el niño quien debe ir poco a poco familiarizándose y reconociéndolos como parte significativa y favorable para su vida.

De manera progresiva va iniciando vínculos nuevos con sus maestras y demás personal del jardín, reconoce el lugar y lo asocia a actividades lúdicas, divertidas y significativas, y comienza a disfrutar de sus primeros contactos con pares y compañeros que se convertirán en sus primeros “amiguitos” con quienes compartirá su vida escolar –eso sí- guiados y orientados por sus maestras.

Paralelamente al fortalecimiento de sus vínculos en el jardín, también debe aprender a despegarse de forma paulatina de sus padres y cuidadores y lo debe hacer idealmente de manera segura. El punto clave de este “desapego seguro” está en manos de padres y familia quienes deben adoptar una actitud de seguridad y confianza al momento de dejar al niño en el jardín o en la ruta, e inclusive al momento de recogerlo en el jardín o recibirlo de la ruta escolar.

Evitar expresar angustia, preocupación, temor y llanto es necesario a la hora de dejar al niño. La expresión corporal y facial es muy importante a la hora de entregar al niño. Evitar frases como “te voy a extrañar”, “no te preocupes que.”, “tranquilo que…” entre otras, pueden provocar ansiedad o dar un mensaje ambivalente al niño quien interpreta y entiende la angustia de mamá, papá o abuelita como un mensaje de inseguridad, de ansiedad, de temor por lo que puede responder directamente con llanto y apego como mecanismo de defensa primario.

El jardín infantil es el espacio en el que los niños y niñas establecerán las relaciones primarias con quienes a largo plazo representarán los más bellos recuerdos de las primeras veces protagonizando mil aventuras; es tiempo de confiar en que la adaptación a este maravilloso espacio será la mejor y el poyo que nos brindan los profesionales en esta institución es el más adecuado.

 

Zully Rodriguez Solano

Esp. Neuropsicología Escolar

Terapeuta Ocupacional

 

Descubre todas las opciones adicionales que Dreams tiene para ti.